El complemento definitivo para la juventud de la piel, este sérum micronutritivo reparador concentra el doble poder de la Rosa de Granville, del tallo a la flor, para una reparación de la piel dos veces más rápida (1). Las mujeres observan que su piel está cuatro veces más rellena (2).
El poder de las 10 000 (3) microperlas ricas en micronutrientes de rosa revitalizantes se completa con la capacidad regeneradora de la savia de la Rosa, 4 veces más potente que el ácido retinoico para la revitalización de la piel (4).
Desde la primera aplicación del sérum, la piel parece repulpada y rellena desde el interior, con un aspecto más firme, más radiante. Los contornos del rostro parecen realzados. El 100 % de las mujeres (5) perciben que su piel parece más joven.
(1) Test instrumental con 32 panelistas tras 30 minutos.
(2) Autopuntuación con 30 mujeres sobre la evolución de la eficacia. Comparación entre la aplicación inmediata y tras 1 mes de uso.
(3) En un frasco de 30 ml.
(4) Test in vitro de los ingredientes sobre 3 procesos alterados por la edad a nivel epidérmico (diferenciación, adhesión, hidratación).
(5) Autopuntuación con 61 mujeres tras 1 mes de uso.
Beneficios:
En cada dosificación, el perfume emblemático de Dior Prestige proporciona un placer instantáneo para una sensación de profunda relajación.
Desde la primera aplicación, rebosante de una nutrición intensa y profunda, la piel está visiblemente rellena y parece descansada. En tan solo 1 semana, parece más firme.
La piel recupera su densidad de forma significativa. Con un aspecto repulpado y relleno desde el interior, parece más firme, más radiante. Con cada aplicación, su transformación se ve, se nota y se siente.
Consejo de aplicación:
1. Deposite de dos a tres dosis del sérum sobre la palma de la mano. A continuación, con las yemas de los dedos, aplíquelo sobre todo el rostro desde el centro hacia el exterior.
2. Efectúe ligeras presiones para que el sérum se absorba en profundidad.
3. Por último, para realzar los contornos, coloque la barbilla entre los dedos índice y corazón de ambas manos y deslícelos hacia arriba a lo largo de la mandíbula.